En México, productores, investigadores y líderes comunitarios están trabajando juntos para ampliar la producción agroecológica de cítricos y cultivos asociados en el norte del estado de Veracruz. El equipo utiliza capacitación en el campo, redes de asistencia técnica, parcelas de demostración y “faros” agroecológicos (granjas con sólidos antecedentes de éxito) para desarrollar capacidades para que otros en la región abandonen el uso de agroquímicos y adopten métodos que prioricen los insumos locales y la salud de los ecosistemas a largo plazo. El proyecto también incluye esfuerzos para incidir en las políticas públicas, por ejemplo, presionando para mantener los planes para una prohibición del glifosato en todo el país y abogando para poner fin a la aplicación de pesticidas en Veracruz y Puebla.

El trabajo se basa en los 20 años de experiencia de la finca Huerta Madre en la transición gradual del cultivo de cítricos convencional a un sistema agroecológico holístico. Para 2024, más de 3.500 pequeños productores participaban en esta transición, dejando de usar los agroquímicos y adoptando técnicas como cultivos de cobertura, manejo manual de arvenses y aplicación de bioinsumos artesanales. Muchos productores participantes son indígenas y hay una fuerte representación de mujeres. La visión del grupo es detener el uso de agroquímicos en la región y ampliar gradualmente la agroecología, dando prioridad a las economías comunitarias, diálogo de saberes, intercambio de conocimientos en red, la justicia social, la salud y el bienestar rural.